El artista brasileño Ernesto neto hace esculturas blandas que el espectador puede atravesar, sentir, tocar y oler. Instalaciones textiles que son una fusión entre arquitectura y escultura y con las que el visitante interactua. Empezó en 1995 y se ha convertido en uno de los artistas con más renombre de su país. 

En 2014 hizo una instalación en el museo Guggenheim de Bilbao y aunque no pudimos ir a verla en persona hemos podido hacer un mini tour virtual

aquí

 (aunque sin la posibilidad de tocar y abrazar)

Esperamos que hagan otra más cercana para poder ir a abrazar sus esculturas textiles. Colgadas del techo, saliendo del suelo, tamaños gigantescos hechos con telas blancas, con gasas, poligamia (como las medias), redes… Sus formas orgánicas y textiles nos fascinan. Os dejamos fotos de algunas instalaciones suyas. Algunas de sus esculturas nos recuerda un poco al parque de ganchillo de la artista japonesa Toshiko Horiuchi de la que hablábamos en 

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